Los gastos hipotecarios son aquellos que se cotizan para legalizar un préstamo bancario. Es decir, la formalización de una hipoteca trae consigo el pago de ciertos procesos financieros que son necesarios para la prestación del dinero.
Estos gastos hipotecarios varían de acuerdo a la entidad bancaria donde se lleve a cabo, por procesos judiciales y cambios en las regulaciones.
Algunos de estos pagos corren por cuenta del banco, sobre todo aquellos que se reflejan en la ley hipotecaria. Sin embargo, existen otros pagos que si corren por cuenta del cliente que solicita el préstamo.
El coste de la tasación, los honorarios de la gestoría, el notario, los impuestos sobre actos jurídicos documentados y el registro de propiedad, son algunos de los gastos relacionados con la formalización de la compraventa del préstamo hipotecario.
Un aproximado total de todos ellos suponen, al menos como media, un 10% del importe financiado. Pagar estos costos iniciales, que se presentan antes y después de la concesión de la hipoteca son necesarios para su legalización como préstamo bancario.
Su costo va a depender del precio del inmueble o del valor total de la hipoteca.
Además, estos gastos hipotecarios varían dependiendo de dos factores principales. El primero de ellos es el importe del préstamo o de la operación compraventa. Sometidos a esto se encuentran los trámites como la notaría, los impuestos o el registro de propiedad.
El otro factor que influye en estos gastos es lo relacionado con servicios de terceros, como es el caso de la tasación o de la gestoría. Dado que es necesario la auditoría y colaboración de profesionales financieros para el financiamiento de la hipoteca, a quienes se les deben pagar ciertos honorarios por su trabajo.
Sin embargo, se puede calcular un aproximado del gasto total en esta documentación.
¿Cómo se puede calcular los gastos hipotecarios?
Calcular los costes de una hipoteca representa un paso crucial e importante cuando una persona decide solicitar un préstamo hipotecario al banco. Para calcularlos se puede partir de un ejemplo real de préstamo y adicionarle todos los gastos posibles que acarrea este tipo de trámites.
A continuación, te presentamos un ejemplo bajo dos monedas, el euro (€) y el dólar ($). Vale la pena acotar que estos ejemplos pueden ser condicionados a la moneda que se maneje en cada país, esto es solo un aproximado.
Supongamos que se acuerda con el centro financiero un préstamo hipotecario de 100.000€, lo que es igual a 112.375,00$. Los costes estimados de cada gasto serían:
- Tasación: el trámite que le concede al banco conocer el valor del inmueble a hipotecar. Con un costo aproximado de 320€ / 359,60$.
- Comisión de apertura: siendo el porcentaje que aplica el banco al momento de negociar una hipoteca, puede equivaler entre el 1% y el 2% del préstamo. En este ejemplo valdrá 1% lo que es igual a 1.000 euros / 1123,75 dólares.
- Gestoría: Los honorarios de la gestoría vienen dados por la legalización del contrato en el registro de la propiedad y la liquidación de impuestos. En este caso tendrían un valor de 250€ / 280,94$.
- Notaría: el notario es el encargado de otorgar públicamente la escritura del préstamo hipotecario. Su costo sería de 650€ / 730,44$.
- Impuesto de actos jurídicos documentados: el IAJD se paga una vez se suscribe el documento notarial, este proceso es avalado por la ley. Para nuestro ejemplo tendría un valor de 750 euros / 842,81 dólares.
- style="font-weight: 400;">Registro de propiedad: este proceso es el que legitima a la persona como la única propietaria de la vivienda o inmueble que va a comprar. Su costo sería de 170€ / 191,04$
- Monto total de gastos hipotecarios: 3140 euros / 3528,58 dólares.
Ahora bien, este sería el monto total de los gastos de la hipoteca. Sin embargo, no todos ellos corren por cuenta del cliente. El monto a pagar por la persona que pide el préstamo, sumaria un total de 1320€ / 1483,35$. Donde se incluye solo los gastos de la tasación y de la comisión de apertura. Esta última en ocasiones ni siquiera suele cobrarse, dependerá del banco donde se realice el trámite.
Todos los demás gastos correrían por cuenta del centro financiero. Aunque se tiene que tener presente que muchos de ellos negocian con sus clientes estos gastos y costos.
Prueba con un simulador de compra de viviendas
Si calcular los gastos hipotecarios resulta difícil o complicado utilizando el ejemplo anterior. Muchas plataformas financieras en internet ponen a su servicio simuladores de compra de viviendas.
A través de este programa se puede calcular en segundos una posible factura hipotecaria, lo que da a la persona una idea de lo que deberá afrontar para adquirir su inmueble. Incluso pueden incluir otros gastos extras relacionados con la adquisición de la nueva vivienda.
En dichas herramientas se indica únicamente el valor del inmueble que se desea adquirir. A partir de esta cifra el simulador de gastos hipotecarios genera todas las cuentas, costos y cálculos necesarios para conocer los costes extras del préstamo hipotecario.
Además, algunas de estas páginas cuentan con ofertas de hipotecas en el mercado. Lo que permite visualizar, comparar y conocer sus características para saber cuál de ellas es la mejor. Finalmente se puede iniciar un proceso de contratación de la que resulte de mayor interés para la persona.
Con todo esto claro, busca la mejor oferta hipotecaria para hacer tu inversión
No vale para nada la pena que te cases con la primera opción que te ofrezca tu banco pudiendo conseguir mejores ofertas en otros centros financieros. Si cumples con los requisitos necesarios para solicitar un préstamo hipotecario y, además, tienes el compromiso de pagar las cuotas mensuales que se originen por su financiamiento puedes encontrar grandes propuestas en el mercado.
Como viste en este artículo, calcular los gastos hipotecarios es un paso sumamente importante antes de optar por la hipoteca que más te conviene.
Tomar estas previsiones ante el posible financiamiento de un préstamo bancario, son necesarias para conocer la suma de costes que hay que tener en cuenta. Sin estos gastos no es posible que se formalice la operación financiera. Además, tener en cuenta que no se encuentran cotizados dentro del dinero solicitado como préstamo hipotecario, permite darse cuenta que de igual forma hay que invertir en la compraventa en el presente.